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Mostrando las entradas etiquetadas como Amor

(AMO LA SOLEDAD CUANDO TE ESPERO)

 Por Inés García Calderón   Amo la soledad cuando te espero. Amo tu flecha que me convierte en arco. Amo tu rigidez que me convierte en tumba. Amo la soledad cuando te espero.

LA COMEDIA DEL AMOR

 Por Henrik Ibsen    (Fragmento del Primer acto) Svanhild: Mire usted el manzano que está cerca de la haya. Este año no tiene flor ni fruto. El año pasado lo habría visto hermoso, con la copa inclinándose al peso de los frutos. Falk: Le creo. Pero, ¿qué deducción saca? Svanhild (con cortesía) : Que al árbol que dio espléndidos frutos y por darlos se debilitó, no se le puede exigir todos los años la misma riqueza. Falk: Ya me figuraba yo que sabría usted sacar una consecuencia juiciosa de su historia. Svanhild: Seguramente el valor en nuestros días tiene una fuerza relativa. ¿A quién se ama hoy? ¿Quien consiente en sacrificarse? ¿Dónde está el héroe? Falk  (mirándola fijamente) : ¿Y dónde la Walquiria? Svanhild  (moviendo la cabeza) : La Walquiria no es necesaria. El año pasado, cuando las persecusiones; contra los cristianos en Siria, ¿se hizo usted cruzado? No. Escribió unas cuantas palabras elocuentes en un papel y envió el importe de su suscripción a un periódico clerical. (Falk par

ALQUIMIA

 Por Rosina Valcárcel    En la edad de la razón envío todo al infierno canto en medio del caos celebro el amor en los parques el mensaje de mis hijas y la poesía de mis mejores amigos con quienes conspiro alguna locura para guarecerme de la hostilidad del tiempo

LOS FAVORES DE LA LUNA

 Por Charles Baudelaire    La Luna, que es el capricho mismo, miró por la ventana mientras dormías en tu cuna, y se dijo: «Esta niña me gusta». Y bajó suavemente por su escalera de nubes y pasó sin ruido a través de los cristales. Después se extendió sobre ti con la blanda ternura de una madre y depositó sus colores sobre tu rostro. Tus pupilas quedaron por ello verdes y tus mejillas extraordinariamente pálidas. Contemplando a esta visitante, tus ojos se han agrandado tan extrañamente, y tan tiernamente ha ceñido ella tu garganta, que te ha quedado un continuo deseo de llorar. Sin embargo, en la expansión de su alegría, la Luna llenaba toda la estancia, como una atmósfera fosfórica, como un veneno luminoso y toda esa luz viviente pensaba y decía: «Tú sufrirás eternamente la influencia de mi beso. Serás bella a mi manera. Amarás lo que yo amo y me ama: el agua, las nubes, el silencio y la noche; el mar inmenso y verde; el agua informe y multiforme; el lugar donde no estés; el amante que

EL LOCO Y LA VENUS

 Por Charles Baudelaire    ¡Qué día admirable! El vasto parque se extasía bajo el ojo ardiente del sol, como la juventud bajo el dominio del Amor. El éxtasis universal de las cosas no se expresa por ningún ruido; los mismos ojos están como dormidos. Muy diferente de las fiestas humanas, es ésta una orgía silenciosa. Se diría que una luz siempre creciente hace resplandecer cada vez más los objetos; que las flores excitadas arden en deseos de rivalizar con el azul del cielo con la energía de sus colores y que el calor, haciendo visibles los perfumes, los hace ascender hacia el astro como el humo. Sin embargo, en este gozo universal, he advertido un ser afligido. A los pies de una Venus colosal, uno de esos locos artificiales, uno de esos bufones voluntarios encargados de hacer reír a los reyes cuando el Remordimiento o el Fastidio les obsesiona, ataviado con un traje brillante y ridículo, coronado de cuernos y de cascabeles, acurrucado en el pedestal, eleva hacia la inmortal Diosa unos o

EL EXTRANJERO

 Por Charles Baudelaire   —¿A quién amas más?, dí, hombre enigmático, ¿a tu padre, a tu madre, a tu hermana, o a tu hermano? —No tengo padre ni madre, ni hermana ni hermano. —¿A tus amigos? —Utiliza usted una palabra cuyo significado no conozco hasta el momento. —¿A tu patria? —No sé en que latitud está situada. —¿A la belleza? —La amaría de corazón, diosa e inmortal. —¿Al oro? —Lo odio como odia usted a Dios. —Entonces, ¿qué es lo que amas, extraordinario extranjero? —¡Amo las nubes... las nubes que pasan... allá... allá... maravillosas nubes!